Una versión de este tutorial se publicó originalmente en la aplicación gratuita Primer.
Las ideas pueden venir de cualquier parte y todo el mundo es creativo.
Esta creencia es la base del pensamiento creativo, una práctica que combina creatividad y organización para resolver problemas complejos. En Google, el pensamiento creativo nos ayuda a fomentar una cultura de innovación. Así, nuestros equipos desarrollan ideas y las ponen a prueba de forma creativa y eficaz, por ejemplo, para que comunidades remotas del planeta tengan acceso a Internet o para desarrollar nuevas metodologías aplicables a las entrevistas de personal.
El pensamiento creativo nos hace adoptar una perspectiva que refuerza la capacidad de innovar. Las habilidades que se desarrollan con el pensamiento creativo se pueden aplicar a diferentes técnicas, como la metodología Design Sprint, un proceso pensado para probar ideas con prototipos rápidos.
¿Quieres poner en práctica el pensamiento creativo? La próxima vez que tengas que resolver un problema, fomenta la capacidad creativa de tu equipo. Para ello, sus miembros deberán centrarse en tres principios básicos: empatía, pensamiento expansivo y experimentación.
Los tres pilares del pensamiento creativo
Empatía
¿A quién no le gusta desarrollar productos y servicios innovadores? Nadie quiere crear algo inútil. Por eso, tu principal objetivo deben ser los usuarios. Si eres capaz de empatizar con ellos y entender sus necesidades, sentimientos y motivaciones, tu equipo podrá ofrecerles soluciones útiles para problemas reales.
Antes de empezar un proceso creativo, debes determinar quién usará tu producto o servicio. Si es posible, habla con esas personas directamente. A mediados de los años 2000, en Google replanteamos nuestros procesos de selección de personal, que duraban entre seis y nueve meses. Para ello, quisimos saber por qué "todo el mundo tenía malas experiencias con entrevistas de trabajo en Google" Al empatizar con los candidatos, el equipo de recursos humanos de Google fue capaz de desarrollar ideas centradas en reducir de forma significativa el tiempo que tardaba en contratar empleados y en mejorar la experiencia de los candidatos en general.
Pensamiento expansivo
El pensamiento expansivo, o lluvia de ideas, consiste en crear distintas formas de resolver un problema o mejorar una situación. En lugar de buscar una única solución perfecta, enfoca el problema desde diferentes ángulos para encontrar varias soluciones posibles. Puede que la mayoría de las ideas que se planteen en tu equipo no funcionen, pero no pasa nada.
Para empezar con una lluvia de ideas, reta a tu equipo a pensar en ideas que no solo mejoren la situación actual en un 10 %, sino que hagan que sea diez veces mejor. Pensar a lo grande puede hacer que se planteen ideas totalmente innovadoras.
Cuando un equipo de Google empezó a trabajar en lo que más tarde se convertiría en Loon, una iniciativa para ofrecer servicios de Internet a comunidades recónditas de todo el mundo que ahora es filial de Alphabet, aplicó el pensamiento 10x. Con esta estrategia, pasaron de buscar soluciones limitadas, como instalar más fibra, a una solución realmente innovadora: usar una red de globos que viajaran por la estratosfera para proporcionar conectividad.
Experimentación
Una vez que tienes una lista de ideas, debes averiguar cuáles funcionan y cuáles no, y debes hacerlo rápido. Es en este punto cuando empiezas con la experimentación o creación de prototipos.
En la fase de prototipado, deberás desarrollar una versión inicial de tu idea y ponerla a prueba con un pequeño grupo para saber qué funciona realmente. Después, tendrás que analizar los resultados para decidir si es mejor continuar con esa idea, descartarla o hacer modificaciones.
La forma de crear prototipos depende de cada proyecto. Por ejemplo, puedes probar un producto de forma interna antes de lanzarlo o empezar a ofrecer un servicio en fase beta para conocer la opinión de los usuarios ajenos a tu empresa antes de que esté disponible públicamente. En el 2014, el equipo de Google Primer lanzó una versión beta de su aplicación educativa, que solo contenía 12 lecciones, para que las probaran determinados usuarios. Así, el equipo pudo perfeccionar tanto la experiencia de usuario como los contenidos para lanzar la aplicación Primer de forma oficial un año después.
El pensamiento creativo es una metodología innovadora para resolver problemas que está al alcance de cualquiera. Si empatizas con los usuarios, pones en práctica el pensamiento expansivo y experimentas con tus ideas, tu equipo podrá desarrollar todo su potencial creativo.