La experiencia digital se traslada al móvil, los bloqueadores de anuncios crecen en su adopción, el tiempo de atención se acorta, el reto de destacar entre tanto ruido se antoja todavía más complicado. Tanto si una marca no conoce los incentivos que ofrece una buena estrategia de branded content, como si ya tiene claro su valor, a través de estas 9 pautas que resumen los conocimientos de los que dominan los medios generadores de contenidos, las empresas pueden aprender a mejorar y liderar esta tendencia.
1.El vídeo es el rey del branded content
La llegada del vídeo a internet ha supuesto un cambio clave en la forma de consumir contenido en la red: aunque la lectura sigue siendo el método más eficiente para consumir información en diagonal, además de para los paso a paso y para contenidos de más profundidad, no cabe duda de que lo audiovisual está conquistando a las audiencias en internet, y que para las marcas supone afrontar una suerte de transformación narrativa a la hora de crear contenidos.
2.Adaptación del contenido a la audiencia
Aunque sea la misma persona, la audiencia está abierta y prefiere diferentes tipos de contenidos y narrativas cuando está en una red social que cuando accede a un medio o cuando busca algo en Google. Por ello, la fórmula basada en un único storytelling para todos se antoja como un billete hacia el fracaso.
3.Definición del ADN de la marca
Llevar a cabo cualquier estrategia para conseguir el click, independientemente de la imagen y filosofía de la marca, es la mejor forma de acabar con su reputación y personalidad. Esta pauta unida a los dos puntos anteriores nos indica que es necesario explorar formatos (más tradicionales o más innovadores en lo digital), narrativas, tonos, enfoques y temáticas con el objetivo de encontrar la estrategia con la que una marca verdaderamente se identifique.
4.Analizar los datos para mejorar el contenido
El mundo de los contenidos ha mejorado cuando ha dejado de ser 100% artesanal para evolucionar a una disciplina que conjuga lo humanístico con lo científico y las decisiones se toman en base a los datos analizados y los resultados obtenidos.
5.El papel clave de la distribución
La cantidad de contenido que se produce y la calidad y originalidad diferenciadoras del mismo no son el único reto que plantea el branded content: la gran parte del esfuerzo de una marca se debe centrar en cómo hacerlo llegar a su público objetivo.
Hay varias consideraciones estratégicas que hacer al respecto: ¿vivirá el branded content en los canales propios de la marca o en los de terceros?, ¿residirá el valor de la acción puramente en su alcance o dependerá también en la alianza y asociación con otra marca o canal? En cualquier caso, es recomendable testear y guardar presupuesto para la tarea de distribución.
6.Llegar al público objetivo, más allá de los millennials.
Si una marca se centra solo en los nativos digitales, corre el riesgo de perder el salto generacional. En este sentido, la exploración de temas, formatos y estilos se impone como un mandamiento para las empresas que quieren llegar a un público al que acompañar en su proceso de maduración en internet.
7.Guardar un presupuesto para el error
Conocer las tendencias que acabarán siendo hegemónicas en el mundo de los contenidos es imposible de predecir. Sin embargo, no adaptarse a las nuevas innovaciones ha pasado factura al mundo de los medios con respecto a las empresas tecnológicas. De ahí la importancia de experimentar y guardar un presupuesto para el error.
8.Mix de contenido, tecnología y usabilidad
El arte de las piezas, tener en cuenta la experiencia de usuario, así como la adaptación a cada canal son aspectos que suelen quedar en segundo plano pero que a día de hoy son indispensables para marcar la diferencia entre crear valor y ruido con el branded content.
9.Retorno a las esencias
La técnica en el branded content es importante, pero su esencia es fácil de olvidar: el branded content funciona y tiene sentido porque desde siempre compartir y escuchar las historias es lo que la audiencia demanda. Esa necesidad de que nos cuenten, de contar, de contarnos es lo que, en definitiva, mantiene el valor del branded content.