Kevin Allocca, director de Cultura y Tendencias de YouTube, comparte tres datos clave sobre cómo el vídeo está transformando la cultura popular.
El primer vídeo de YouTube se publicó en abril del 2005. Se titula "Me at the zoo" ("Yo en el zoo") y muestra un momento cotidiano de un día cualquiera sin ninguna otra pretensión. Los temas que impulsaron los inicios del vídeo online eran personales y nuevos para nosotros (aunque no lo eran para una audiencia prevista de millones de usuarios). El contenido puede haber evolucionado, pero el espíritu de esos primeros vídeos continúa siendo lo que ha diferenciado a YouTube todos estos años.
Como director de Cultura y Tendencias de YouTube, he dedicado los últimos siete años a estudiar la creatividad y el comportamiento emergentes en relación con los vídeos, y quiero compartir tres grandes tendencias que creo que definen la cultura popular moderna.
La instauración de la canalización
Cuando hablamos sobre lo que los usuarios ven en YouTube, a menudo se trata de famosos vídeos virales o creadores con mucha audiencia. Antes, los medios que proporcionaban la tecnología multimedia y las cadenas de distribución para compartir géneros ocultos o inesperados con una audiencia amplia eran relativamente pocos. Pero ahora, con el descubrimiento guiado por el aprendizaje automático, se ha abierto un abanico de contenidos, y lo oculto ha salido a la luz.
Cada día, la página principal de YouTube muestra más de 200 millones de vídeos distintos y proporciona a los espectadores experiencias variopintas que van desde el death metal pirata a las explosiones a cámara lenta. Este nivel de variedad y de descubrimiento ha provocado una inversión en los medios: ahora, en lugar de crear contenido para atraer a una audiencia amplia, los creadores web pueden perseguir sus pasiones personales y las audiencias que compartan dichas pasiones pueden encontrarlos. Ocasionalmente, estas audiencias pueden crecer considerablemente tanto en tamaño como en influencia. Por ejemplo, el año pasado, la gurú de la belleza Cristine Rote lanzó el vídeo 100 Layer Challenge (Reto de las 100 capas) y se aplicó más de 100 capas de esmalte holográfico en las uñas. A raíz de su iniciativa, emergieron decenas de miles de vídeos de personas intentando aplicarse o ponerse 100 capas de lo que fuera (ropa o autobronceador en espray, por ejemplo) que acumularon más de 600 millones de visualizaciones en total durante el tiempo que duró esta tendencia en el 2016. Rote y su audiencia de cuatro millones de suscriptores adictos a los esmaltes de uñas representan una de las numerosas comunidades que conectan a usuarios por medio de pasiones concretas y que, a la vez, interactúan de una forma que influye en las tendencias del consumo y el ocio.
Interacción
La creatividad en YouTube se explora a través de la interacción, con formas de entretenimiento totalmente nuevas que emergen de las relaciones interpersonales en torno al contenido que prefieren los usuarios. Por ejemplo, cuando Animal Adventure Park (en el norte del estado de Nueva York) instaló una cámara para grabar a April, una jirafa embarazada, nadie sabía qué tipo de audiencia tendría este contenido. Durante los meses siguientes, la emisión en directo de April pasó a ser un fenómeno internacional: acumuló más de 3,5 millones de visualizaciones diarias y se convirtió en una de las cinco emisiones en directo más populares de YouTube de todos los tiempos. Los espectadores no solo accedían al contenido, sino que invertían un tiempo medio de visualización de más de 30 minutos, lo cual es sorprendente dado que la mayor parte del tiempo no ocurría nada.
La popularidad del fenómeno de April nunca se debió a la emisión, sino a las conversaciones que se generaron. Se trata de interacción, no de consumo. De esta manera, YouTube se convierte en un entorno creativo que es a la vez interactivo, colaborativo y claramente personal. ¿Dónde sino alguien como el bailarín Gabriel Valenciano (que grababa vídeos en su habitación o su garaje sin intención de hacerse famoso) hubiera podido ver el formato de su trabajo "super selfie" reflejado en el vídeo "7/11" de una estrella internacional como Beyoncé?
Expresión individual
A medida que nos alejamos de la distribución unidireccional para una audiencia amplia, lo que vemos, lo que compartimos y cómo interactuamos se origina a partir de experiencias, perspectivas y relaciones individuales. YouTube siempre ha sido un lugar donde los pequeños momentos pueden convertirse en cultura y, a lo largo de los años, una nueva clase de talentos populares ha transformado la creatividad personal (a pequeña escala) en un nuevo estándar.
Lily Singh empezó a crear vídeos en el 2010 para combatir el aburrimiento y la depresión, y desde entonces se ha convertido en una de las estrellas más famosas de todo el mundo a través de su canal de YouTube. Del mismo modo, Carly Fleischmann ha mostrado su experiencia como mujer joven con autismo a una audiencia de millones de usuarios a través de su programa "Speechless" ("Sin palabras"), donde entrevista a famosos, como Channing Tatum, con una calidez y un ingenio increíbles.
Los famosos convencionales también han aprovechado la oportunidad de conectar directamente con sus fans. Los seguidores de The Rock y de Demi Lovato consideran YouTube el hogar de sus fans, mientras que James Corden se ha convertido en una de las estrellas de la comedia más famosas gracias, en parte, a la enorme popularidad online de su serie "Carpool Karaoke". Como ya sabemos, durante años, los usuarios han subido vídeos a YouTube de sí mismos cantando en el coche, siguiendo el mismo estilo desenfadado y espontáneo que ahora es tan popular en el programa de Corden. Por lo tanto, en cierto sentido, uno de los fenómenos mediáticos del 2016 está firmemente vinculado a la estética y la cultura de YouTube.
Definir la cultura que nos rodea
Las experiencias canalizadas, la interactividad y la expresión individual han contribuido a transformar el vídeo web en un medio característico de este joven siglo. No solo representan un cambio en el entretenimiento, sino un movimiento cultural que impulsa las voces de millones de usuarios para definir la cultura que nos rodea.
YouTube es un medio que refleja más que cualquier otro quiénes somos y qué nos apasiona. Nos desafía a pensar de forma distinta sobre nosotros mismos y el significado del entretenimiento. Además, representa a una comunidad viva y palpitante que cambia a diario y que remodela la cultura popular de toda una generación. Es la primera vez que un medio global es tan rico, inventivo, original y genuino.