Raja Saggi es director senior de Marketing de Producto de Google en Reino Unido, fundador del grupo de afinidad para empleados “Asians in Marketing”, y orador frecuente en los principales eventos de la industria. Es, también, un introvertido.
Nunca me consideré introvertido hasta que empecé a trabajar en marketing. Mientras estudiaba ingeniería, y al principio de mi carrera en desarrollo de productos y programación, me sentía como todos los que me rodeaban: analítico y reflexivo, una persona que prospera y se recarga en los momentos más tranquilos.
Mi paso al área de Ventas y Marketing cambió eso. De repente, el énfasis estaba en la espontaneidad y la participación. Me encontré en un mundo de extrovertidos, donde el lenguaje corporal, el trabajo en la habitación y la capacidad de colaborar en el momento, importaban.
Pero la industria del marketing está cambiando, y con ella el valor de los introvertidos. En una era definida por los datos, el análisis y la habilidad de conectar con las audiencias, la demanda por las habilidades de los introvertidos está en su punto más alto.
Explora cómo aprendí a aprovechar mis fortalezas, cómo fomenté esos mismos atributos en los demás y por qué ahora es el momento perfecto para hacerlo.
El tiempo de los introvertidos es ahora
Durante mi tiempo en la industria, el marketing ha evolucionado, sin dudas, hacia una profesión más analítica. Casi 4 de 5 especialistas en marketing a nivel mundial dijo que, ahora, la calidad de los datos es clave para impulsar el crecimiento desde el marketing y la experiencia de cliente. Este cambio juega a favor para que aquellos con tendencias introvertidas se sientan más cómodos trabajando.
Los datos no solo ayudan a los introvertidos a expresar su punto de vista (la mayoría de las historias que cuento se basan en números), sino que también nos gusta trabajar con los hechos. Nos gusta escuchar y asimilar toda la información antes de tomar una decisión. Estas cualidades ayudan a que los introvertidos encajen perfectamente en el escenario del marketing actual, en donde escuchar a los clientes es esencial para entender y responder a sus necesidades cambiantes.
Lo mismo sucede con las marcas. Google siempre ha estado orgulloso de basarse en datos, tanto que, en los primeros días, los equipos de Ingeniería tenían carteles que decían “Confiamos en Dios. Todos los demás deben venir con datos”. Esto requirió un gran cambio cultural, especialmente en áreas como la de Marketing.
Los introvertidos encajan perfectamente en el escenario del marketing actual, en donde escuchar a los clientes es clave para entender y responder a sus necesidades cambiantes.
Pero recientemente hemos visto una tendencia en organizaciones que adaptan algunas de esas características más introvertidas. Gymshark, por ejemplo, pasó de actuar “por intuición” a tomarse el tiempo para escuchar a los clientes y poner datos detrás de sus grandes decisiones. Este enfoque analítico ayudó a la marca de ropa deportiva a responder a los complejos comportamientos de los clientes e impulsar el rendimiento del marketing.
Y más que a otra audiencia, hoy es importante escuchar a la Generación Z, que representa alrededor de un tercio de la población mundial. Como comentó Alex Schmider, director de representación trans en GLADD: “Un anuncio pegadizo no ganará por sí solo a estos consumidores”. Sostiene que para conectarse de manera auténtica y significativa “este grupo demanda que las empresas y los productos reflejen sus valores en la práctica interna y la publicidad externa”.
Esto es algo que creo que los introvertidos, gracias a su naturaleza analítica y reflexiva, están bien preparados para conseguir.
Aprovecha el poder de los introvertidos
Por supuesto, que nadie es 100% extrovertido o introvertido. Todos encajamos en algún lugar en una escala entre los dos y la forma en la que nos comportamos o nos sentimos en cualquier momento se ve profundamente afectada por el contexto.
Por ejemplo, una persona que se siente extrovertida trabajando en un país puede sentirse de una manera muy distinta en otro. Hago muchas mentorías en torno a la revisión de desempeño y, frecuentemente, veo cómo algunas personas asiáticas y europeas pueden tener dificultades para hablar de sus logros. No es que sean tímidas: se trata de algo culturalmente arraigado, y esto puede ponerlas en desventaja en ese entorno.
Trabajo con ellas para superar esos desafíos, pero es algo que las empresas deben tener en cuenta en su proceso de revisión.
Las organizaciones necesitan aceptar un amplio espectro de voces, y siempre debe incluir las silenciosas.
Las reuniones grandes también pueden ser desafiantes. En muchas culturas, como la norteamericana, la gente está acostumbrada a participar en conversaciones grupales y pensar de inmediato, pero esto no funciona para todos.
Por eso es importante que los líderes le den a las personas la oportunidad de prepararse y reflexionar, en lugar de exponerlas. Permitir que envíen sus aportes en múltiples formatos, ya sea compartiendo lecturas previas o utilizando el chat con la función de levantar la mano en una videollamada, puede ayudar a que todas sean escuchadas.
La industria del marketing está experimentando cambios constantes. Para enfrentar los desafíos y las oportunidades que surgen, los líderes y las organizaciones deben reunir diferentes tipos de personalidades y adoptar un amplio espectro de voces, incluidas las más silenciosas.